Usualmente nos referimos a La Santísima Trinidad como uno de los misterios más importantes o fundamentales de la fe cristiana. Pero antes de describir el porqué, me gustaría definir algunas palabras que voy a utilizar para que tengamos la misma base, ya que las palabras pueden tener diferentes significados para ti.
Vocabulario
- Misterio: Cuando hablo a un misterio, no me refiero a algo completamente oculto, o algo de lo cual nunca entenderemos o comprenderemos. Cuando hablo de misterio, me refiero a que no lo entenderemos por completo, pero si tenemos la oportunidad de entender y captar algo sobre ello.
- Substancia: Cuando me refiero a substancia, simplemente me estoy refiriendo a la esencia.
- Relación: Cuando hablo de una relación, simplemente estoy hablando de una unión o conexión.
- Persona: Estamos acostumbrados hablar de persona como ser humano, pero en este caso me voy a referir a persona como algo que tiene una distinción o identidad propia.
- Dogma: Una enseñanza oficial de la fe.
En el mundo actual hay muchas religiones (Judía, Cristiana, Musulmán, Budista, etc.), pero una de las distinción mas grande entre tantas religiones es su creencia en el ser supremo. El ser supremo que muchas de las religiones llaman “Dios”. Algunas de las religiones ven a Dios como uno, otras como muchas entidades. La fe cristiana es una de las pocas que describen o creen en un Dios Trino. Dios trino en el sentido que se considera un Dios, pero tres personas. La mayoría de las otras religiones no creen en un Dios trino, pero las que, si consideran al Dios trino, usan el título La Santísima Trinidad para describir o nombrar a este Dios trino.
El catecismo de la iglesia Católica nos describe esta enseñanza como la base o fundación de toda la fe. En el numeral CIC 234 dice lo siguiente:
234 El misterio de la Santísima Trinidad es el misterio central de la fe y de la vida cristiana. Es el misterio de Dios en sí mismo. Es, pues, la fuente de todos los otros misterios de la fe; es la luz que los ilumina. Es la enseñanza más fundamental y esencial en la “jerarquía de las verdades de fe” (DCG 43). “Toda la historia de la salvación no es otra cosa que la historia del camino y los medios por los cuales el Dios verdadero y único, Padre, Hijo y Espíritu Santo, se revela a los hombres, los aparta del pecado y los reconcilia y une consigo” (DCG 47).
Este numeral nos describe que tan importante es la enseñanza de la Santísima Trinidad para la fe cristiana. La Santísima Trinidad es la fundación de la fe, porque la Santísima Trinidad es Dios. El dogma nos dice que tenemos una esencia o substancia y esta es Dios, pero a la vez esta substancia tiene tres personas que son esencial una de la otra. Las tres personas son el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Cada persona es Dios, pero a la vez es una persona diferente a la otra. Por ejemplo, El Padre no es el Hijo, el Hijo no es el Padre, el Espíritu Santo no es ni el Padre ni el Hijo, pero cada uno es Dios. Esta imagen nos ayuda un poco a ver la relación de las tres personas. Nuevamente hay UN solo Dios, pero tres personas y cada persona es Dios, pero no es la otra persona (ver el vocabulario al principio para recordar las definiciones)
(Image)
El dogma de La Trinidad (Santísima Trinidad) está escrita de esta forma en el catecismo de la iglesia.
253 La Trinidad es una. No confesamos tres dioses sino un solo Dios en tres personas: “la Trinidad consubstancial” (Concilio de Constantinopla II, año 553: DS 421). Las personas divinas no se reparten la única divinidad, sino que cada una de ellas es enteramente Dios: “El Padre es lo mismo que es el Hijo, el Hijo lo mismo que es el Padre, el Padre y el Hijo lo mismo que el Espíritu Santo, es decir, un solo Dios por naturaleza” (Concilio de Toledo XI, año 675: DS 530). “Cada una de las tres personas es esta realidad, es decir, la substancia, la esencia o la naturaleza divina” (Concilio de Letrán IV, año 1215: DS 804).
La Trinidad es simplemente una comunidad donde las tres personas (Padre, Hijo y espíritu Santo) comparten un vinculo de Amor. El amor del Padre es hacia el Hijo y el Espíritu Santo, el amor del Hijo es hacia el Padre y el Espíritu Santo y viceversa. Recuerda que se nos hace difícil entender porque estamos acostumbrado a términos humanos y tenemos que recordar que Dios no es un Dios humano, Dios no es finito el es infinito. La dificultad que tenemos es que queremos entrar a un Dios infinito en una mente finita y por esta razón no lo comprendemos por completo, por esta razón le llamamos un misterio.
¿Si es un misterio como lo sabemos?
Esta pregunta se puede hacer de otra forma, como sabemos que Dios es una Trinidad si nuestra mente es finita y por nuestras propias fuerzas no podríamos llegar a esa conclusión. La forma por la cual sabemos que Dios es Trino es por que EL lo ha revelado poco a poco desde la historia de salvación hasta el día de hoy. Dios es un Dios sabio, por lo cual reconoce que para ayudarnos a entender algo tan diferente, pero a la vez tan importante como la Trinidad, tenía que revelarlo poco a poco. En la biblia podemos ver que, al pueblo de Israel, Dios principalmente se revela como el Padre. Muchas veces encontramos que se describe como el Padre de Abraham, el Padre de Moisés, el Padre de Jacob, usualmente como Padre. Pero mas adelante en la historia de la salvación, encontramos que Dios se encarno en ser humano con el nombre de Jesús. Entonces desde ese momento en adelante ya no lo conocemos solo como Dios el Padre, pero ahora se nos revela también como Dios el Hijo. El Hijo viene al mundo para hacernos conocer y darnos acceso al Padre, pero también para entregarnos y presentarnos al Espíritu Santo. En la biblia cuando Jesús va a subir al cielo el les promete a los apóstoles que él les enviaría a un Espíritu de verdad, al Espíritu de Dios. Después de esta revelación del Padre, Hijo y el Espíritu Santo, se nos hace más fácil ver donde en la historia de salvación podemos encontrar la Trinidad. Cuando hacemos un análisis de la revelación de Dios como Trino, nos damos cuenta de que la Santísima Trinidad siempre ha existido.
En la biblia el ejemplo mas claro para mi sobre la Trinidad se encuentra en el libro de
Mateo 3:13-17
Entonces Jesús llegó* de Galilea al Jordán, a donde estaba Juan, para ser bautizado por él. Pero Juan trató de impedirlo, diciendo: «Yo necesito ser bautizado por Ti, ¿y Tú vienes a mí?».
Jesús le respondió: «Permítelo ahora; porque es conveniente que así cumplamos toda justicia». Entonces Juan consintió*. Después de ser bautizado, Jesús salió del agua inmediatamente; y los cielos se abrieron en ese momento y él[a] vio al Espíritu de Dios que descendía como una paloma y venía sobre Él. Y se oyó una voz de los cielos que decía: «Este es Mi Hijo amado[b] en quien me he complacido».
Este pasaje nos enseña a las tres personas de la Trinidad; el Padre quien habla y dice que el Hijo es su Hijo Amado en quien el se complace, el Hijo quien esta siendo bautizado y el Espíritu Santo en forma de paloma que desciende.
Si vemos en el antiguo testamento nos damos cuenta de que, aunque no se revelo explícitamente, Dios se revelo como Trinidad desde el principio.
Genesis 1:1-3
En el principio Dios creó los cielos y la tierra. La tierra estaba sin orden y vacía, y las tinieblas cubrían la superficie[a] del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la superficie[b] de las aguas. Entonces dijo Dios: «Sea la luz». Y hubo luz.
Desde el principio vemos a Dios describir que el creo los cielos y la tierra, aquí se habla de el Dios creador o también lo describimos como Dios Padre. Mas adelante menciona que el “Espíritu de Dios” se movía sobre la superficie, lo cual nos esta revelando a Dios Espíritu y finalmente menciona que Dios “dijo”, el hablar de Dios, la palabra de Dios es el verbo. Juan 1:1 nos dice “En el principio ya existía[a] el Verbo[b], y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios.” Aquí nos describe al Hijo, ya que el Hijo es el verbo o la palabra hecha carne. Como podemos ver en estos versículos, la Trinidad existía desde el principio porque la Trinidad es Dios.
Dios se nos revela poco a poco, paso a paso, por que es un Dios sabio, y conoce como podemos entender o comprender su misterio mejor. El catecismo de la iglesia nos habla un poco mas de como Dios se nos revela por medio del Espíritu Santo y de tantos canales que usa para expresar quien el es para nosotros.
CIC 687-8
687 “Nadie conoce lo íntimo de Dios, sino el Espíritu de Dios” (1 Co 2, 11). Pues bien, su Espíritu que lo revela nos hace conocer a Cristo, su Verbo, su Palabra viva, pero no se revela a sí mismo. El que “habló por los profetas” (Símbolo Niceno-Constantinopolitano: DS 150) nos hace oír la Palabra del Padre. Pero a él no le oímos. No le conocemos sino en la obra mediante la cual nos revela al Verbo y nos dispone a recibir al Verbo en la fe. El Espíritu de verdad que nos “desvela” a Cristo “no habla de sí mismo” (Jn 16, 13). Un ocultamiento tan discreto, propiamente divino, explica por qué “el mundo no puede recibirle, porque no le ve ni le conoce”, mientras que los que creen en Cristo le conocen porque él mora en ellos (Jn 14, 17).
688 La Iglesia, comunión viviente en la fe de los Apóstoles que ella transmite, es el lugar de nuestro conocimiento del Espíritu Santo:
– en las Escrituras que Él ha inspirado;
– en la Tradición, de la cual los Padres de la Iglesia son testigos siempre actuales;
– en el Magisterio de la Iglesia, al que Él asiste;
– en la liturgia sacramental, a través de sus palabras y sus símbolos, en donde el Espíritu Santo nos pone en comunión con Cristo;
– en la oración en la cual Él intercede por nosotros;
– en los carismas y ministerios mediante los que se edifica la Iglesia;
– en los signos de vida apostólica y misionera;
– en el testimonio de los santos, donde Él manifiesta su santidad y continúa la obra de la salvación.
Como podemos ver, el Espíritu Santo nos ayuda a conocer más esa revelación de Dios, de que Dios es una comunidad de amor, de que Dios es uno en substancia, pero tres personas. Por esta razón Jesús nos dejo el mandato de ser bautizados, para recibir al Espíritu Santo y así poder compartir de la grandeza, de la divinidad y del amor de Dios, el Dios Trinidad, el Dios Trino.
Mateo 28:19-20
Vayan, pues, y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todo lo que les he mandado; y ¡recuerden! Yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo]».
La Santísima Trinidad es uno de los misterios más importantes o fundamentales de la fe cristiana, porque la Santísima Trinidad es Dios. Es la base a nuestra vida, nuestra salvación, nuestro propósito y nuestra eternidad. El Dios Trino, que es una comunidad de Amor entre el Padre, Hijo y Espíritu Santo, nos creó a su imagen y semejanza por amor y para amar. Para que podamos experimentar y vivir el amor de la comunión – común unión del Dios vivo. Fuimos creados para comunidad, fuimos creados para una eternidad, fuimos creados para amar.
Recursos – Te presento algunas citas bíblicas que te pueden ayudar a seguir indagando sobre el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Te invito a orar con estas citas y a pedirle a Dios que te hable y te ilumine según su Espíritu de sabiduría.
Mateo 3:13-17
Entonces Jesús llegó* de Galilea al Jordán, a donde estaba Juan, para ser bautizado por él. Pero Juan trató de impedirlo, diciendo: «Yo necesito ser bautizado por Ti, ¿y Tú vienes a mí?».
Jesús le respondió: «Permítelo ahora; porque es conveniente que así cumplamos toda justicia». Entonces Juan consintió*. Después de ser bautizado, Jesús salió del agua inmediatamente; y los cielos se abrieron en ese momento y él[a] vio al Espíritu de Dios que descendía como una paloma y venía sobre Él. Y se oyó una voz de los cielos que decía: «Este es Mi Hijo amado[b] en quien me he complacido».
Mateo 28:19-20
Vayan, pues, y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todo lo que les he mandado; y ¡recuerden! Yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo]».
Colosenses 1:15
Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito[a] de toda creación.
Hebreos 1:3
Él es[a] el resplandor de Su gloria y la expresión exacta de Su naturaleza, y sostiene[b] todas las cosas por la palabra de Su poder. Después de llevar a cabo la purificación de los pecados, el Hijo se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas,
Juan 14:23
Jesús le respondió: «Si alguien me ama, guardará Mi palabra; y Mi Padre lo amará, y vendremos a él, y haremos con él morada.
Juan 1:1
En el principio ya existía[a] el Verbo[b], y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios.
Juan 1:14
El Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros, y vimos Su gloria, gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.
Características del Padre
Mateo 19:4
Jesús les respondió: «¿No han leído que Aquel que los creó, desde el principio los hizo varón y hembra,
Romanos 8:15
Pues ustedes no han recibido un espíritu de esclavitud para volver otra vez al temor[a], sino que han recibido un espíritu[b] de adopción como hijos, por el cual clamamos: «¡Abba, Padre!».
2 Corintios 1:3
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación,
Características del Hijo
Mateo 1:23
«He aquí, la virgen concebirá y dará a luz un Hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel», que traducido significa: «Dios con nosotros».
Juan 1:14
El Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros, y vimos Su gloria, gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.
Juan 10:11
Yo soy el buen pastor; el buen pastor da Su vida por las ovejas.
Características del Espíritu Santo
Mateo 3:16
Después de ser bautizado, Jesús salió del agua inmediatamente; y los cielos se abrieron en ese momento y él[a] vio al Espíritu de Dios que descendía como una paloma y venía sobre Él.
Juan 15:26
Cuando venga el Consolador[a], a quien yo enviaré del Padre, es decir, el Espíritu de verdad que procede del Padre, Él dará testimonio de Mí,
Hechos 2:1-4
Cuando llegó[a] el día de Pentecostés, estaban todos juntos en un mismo lugar, y de repente vino del cielo un ruido como el de una ráfaga de viento impetuoso que[b] llenó toda la casa donde estaban sentados. Se les aparecieron lenguas como de fuego que, repartiéndose[c], se posaron[d] sobre cada uno de ellos. Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba habilidad para expresarse.
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