Santos Joaquín y Ana
Santo del día para el 26 de julio
(b. siglo I)
Según: www.franciscanmedia.org
En las Escrituras, Mateo y Lucas proporcionan una historia familiar de Jesús, rastreando la descendencia para mostrar que Jesús es la culminación de grandes promesas. No solo se descuida a la familia de su madre, sino que tampoco sabemos nada real sobre ellos, excepto que existieron. Incluso los nombres de Joaquín y Ana conocidos como los padres de María, provienen de una fuente legendaria escrita más de un siglo después de la muerte de Jesús.
Sin embargo, el heroísmo y la santidad de estas personas se infiere de toda la atmósfera familiar alrededor de María en las Escrituras. Ya sea que confiemos en las leyendas sobre la infancia de María o hagamos inferencias de la información en la Biblia, vemos en ella el cumplimiento de muchas generaciones de personas orantes, ella misma inmersa en las tradiciones religiosas de su pueblo.
El fuerte carácter de María en la toma de decisiones, su práctica continua de oración, su dedicación a las leyes de su fe, su firmeza en los momentos de crisis y su dedicación a sus familiares, todo indica una familia unida y amorosa que esperaba a la próxima generación incluso conservando lo mejor del pasado.
Joaquín y Ana, ya sean sus nombres reales o no, representan a toda una serie tranquila de generaciones que cumplen fielmente sus deberes, practican su fe y establecen una atmósfera para la venida del Mesías, pero permanecen incognitos.
Reflexión
Esta es la “fiesta de los abuelos”. Les recuerda a los abuelos su responsabilidad de establecer un tono para las generaciones venideras: deben hacer que las tradiciones vivan y ofrecerlas como una promesa para los niños pequeños. Pero la fiesta también tiene un mensaje para la generación más joven. Les recuerda a los jóvenes que la mayor perspectiva, la profundidad de la experiencia y la apreciación de los ritmos profundos de las personas mayores son parte de una sabiduría que no debe tomarse a la ligera o ignorarse. Si eres abuelo/a te invito a orar por tus nietos, si no te invito a orar por tus abuelos presente, o el alma de tus abuelos difuntos.