Santa Teodora Guérin
Santo del día para el 3 de octubre
(2 de octubre de 1798 – 14 de mayo de 1856)
Según: www.franciscanmedia.org
La confianza en la Providencia de Dios permitió a la Madre Teodora abandonar su tierra natal, navegar al otro lado del mundo y encontrar una nueva congregación religiosa.
Nacida en Francia, la vida de Ana-Teresa Guérin fue destrozada por el asesinato de su padre cuando tenía 15 años. Durante varios años se ocupó de su madre y su hermana menor. Entró en las Hermanas de la Providencia en 1823, tomando el nombre de Hermana Santa Teodora. Una enfermedad durante el noviciado la dejó con una salud frágil de por vida, pero eso no le impidió convertirse en una maestra consumada.
Por invitación del obispo de Vincennes, Indiana, el Sr. Santo Teodoro y cinco hermanas fueron enviadas a Santa María del Bosque, Indiana, en 1840, para enseñar y cuidar a los pobres enfermos. Ella iba a establecer una casa y noviciado. Solo más tarde se enteró de que sus superiores francesas ya habían decidido que las hermanas en los Estados Unidos deberían formar una nueva congregación religiosa bajo su liderazgo.
La Madre Teodora y su comunidad perseveraron a pesar de los incendios, las malas cosechas, los prejuicios contra las religiosas católicas, los malentendidos y la separación de su congregación religiosa original. Una vez les dijo a sus hermanas: “Tengan confianza en la Providencia que hasta ahora nunca nos ha fallado. El camino aún no está claro. A tientas lentamente. No presione asuntos; sé paciente, confía “. En otra ocasión ella preguntó: “Con Jesús, ¿a qué debemos temer?”
La Madre Teodora fue enterrada en la Iglesia de la Inmaculada Concepción, ahora el Santuario de Santa Madre Teodora, en Santa María del Bosque, Indiana. Fue beatificada en 1998 y canonizada como Santa Teodora Guérin ocho años después.
Reflexión
El trabajo de Dios lo hacen personas listas para correr riesgos y trabajar duro, siempre recordando lo que San Pablo les dijo a los corintios: “Yo planté, Apolos regó, pero Dios causó el crecimiento”. Toda persona santa tiene un fuerte sentido de la Providencia de Dios. Te invito a reflexionar en tu vida y a reconocer que tan grande a sido la providencia de Dios contigo y los tuyos.