San Silvestre I
Santo del día para el 31 de diciembre
(d. 335)
Según: www.franciscanmedia.org
Cuando piensas en este Papa, piensas en el Edicto de Milán, el surgimiento de la Iglesia de las catacumbas, la construcción de las grandes basílicas: San Juan de Letrán, San Pedro y otros, el Concilio de Nicea y otros eventos críticos. Pero en su mayor parte, estos eventos fueron planeados o provocados por el emperador Constantino.
Una gran reserva de leyendas ha crecido alrededor del hombre que fue papa en este momento tan importante, pero muy poco se puede establecer históricamente. Sabemos con certeza que su papado duró desde 314 hasta su muerte en 335. Leyendo entre líneas de la historia, estamos seguros de que solo un hombre muy fuerte y sabio podría haber preservado la independencia esencial de la Iglesia frente a la figura abrumadora del emperador Constantino. En general, los obispos se mantuvieron leales a la Santa Sede, y en ocasiones expresaron disculpas a Silvestre por emprender importantes proyectos eclesiásticos a instancias de Constantino.
Reflexión
Se necesita una gran humildad y coraje frente a las críticas para que un líder se haga a un lado y deje que los eventos sigan su curso, cuando afirmar la autoridad de uno solo conduciría a tensiones y conflictos inútiles. Silvestre enseña una valiosa lección para los líderes de la Iglesia, políticos, padres y otras personas con autoridad. Te invito a pedir a Dios la sabiduría, humildad y prudencia de saber cuando actuar y cuando no.