San Leopoldo Mandic
Santo del día del 12 de mayo
(12 de mayo de 1866-30 de julio de 1942)
Según: www.franciscanmedia.org
Los cristianos occidentales que están trabajando por un mayor diálogo con los cristianos ortodoxos pueden estar cosechando los frutos de las oraciones del padre Leopoldo.
Originario de Croacia, Leopoldo se unió a los franciscanos capuchinos y fue ordenado varios años más tarde a pesar de varios problemas de salud. No podía hablar lo suficientemente alto como para predicar públicamente. Durante muchos años también sufrió de artritis severa, problemas de visión y problemas de estómago.
Durante varios años, Leopoldo enseñó patrología, el estudio de los Padres de la Iglesia, a los clérigos de su provincia, pero es más conocido por su trabajo en el confesionario, donde a veces pasaba de 13 a 15 horas al día. Varios obispos buscaron su consejo espiritual.
El sueño de Leopoldo era ir con los cristianos ortodoxos y trabajar por la reunión del catolicismo romano y la ortodoxia. Su salud nunca lo permitió. Leopoldo renovó a menudo su voto de ir a los cristianos orientales; la causa de la unidad estaba constantemente en sus oraciones.
En un momento en que el Papa Pío XII dijo que el mayor pecado de nuestro tiempo es “haber perdido todo sentido del pecado”, Leopoldo tenía un profundo sentido del pecado y un sentido aún más firme de la gracia de Dios esperando la cooperación humana.
Leopoldo, que vivió la mayor parte de su vida en Padua, murió el 30 de julio de 1942 y fue canonizado en 1982. En la liturgia romana su fiesta se celebra el 30 de julio.
Reflexión
San Francisco aconsejó a sus seguidores “perseguir lo que deben desear sobre todas las cosas, tener el Espíritu del Señor y su santa manera de obrar” (Regla de 1223, Capítulo 10), palabras que Leopoldo vivió. Cuando el ministro general capuchino escribió a sus frailes con motivo de la beatificación de Leopoldo, dijo que la vida de este fraile mostraba “la prioridad de lo esencial”. Te invito a reflexionar sobre que es lo importante en la vida y que debes desear, pídele a Dios que te ayude a recibir, mantener y poner su Santo Espíritu en acción.